Compartir con amigos:
Un Día Como Hoy: Juan Joya

Un día como hoy, 25 de febrero de 1934, en Lima, Perú, nacía Juan Joya Cordero.

Tras debutar futbolísticamente en el Concepción Rimac de su país natal, en 1952, y tras pasar por Alianza Lima y River Plate (Arg), llegó a Peñarol en 1961, donde permanecería hasta 1969.

Lo curioso es que, hasta su llegada al país, Joya siempre había jugado como centro delantero. En Peñarol, fue el DT Roberto Scarone quien lo colocó en la punta izquierda. Fue inamovible de su nueva posición, siendo baluarte durante las 8 temporadas que estuvo en el Club.

En Peñarol disputó un total de 178 partidos, en los que convirtió 68 goles. El relator Hebert Pinto lo bautizó "Negro el Once", tal era su número de casaca; aunque también se ganó el apodo de "Dueño de la Olímpica", porque desplegaba su mejor juego frente a esa tribuna. También, cuenta la leyenda, era porque sobre ese sector no se escuchaban las indicaciones del DT Roque Gastón Máspoli.

Con el Carbonero fue Campeón Uruguayo 1961, 1962, 1964, 1965, 1967 y 1968; Campeón de la Copa Libertadores 1961 y 1966; Campeón Intercontinental 1961 y 1966; y Campeón de la Supercopa 1969.

En la Copa Libertadores del '61 se dio la actuación más recordada del peruano, ya que, al jugar contra el Benfica en el Estadio Centenario, el Carbonero ganó 5-0 con dos golazos de Joya al arquero portugués Costa Pereira; el primer gol a los 17', tras pase de Ernesto Ledesma; el segundo, un cabezazo certero tras centro de Alberto Spencer, temible dupla del Aurinegro en aquel entonces.

Joya fue internacional con la Selección de Perú en el período 1957-1959, y disputó la Copa América de 1959. A su vez, también formó parte de la Selección Uruguaya, en dos partidos amistosos disputados en 1962 y 1965.

En 2002, Joya fue elegido por los hinchas como parte del Equipo Ideal de Peñarol de todos los tiempos.

Falleció el 29 de marzo de 2007, a sus 73 años. Tras su fallecimiento, como dice el artículo del sitio Túnel, que pueden leer aquí: "Las banderas de Peñarol a media asta en varias casas montevideanas y de la sede fueron mudo testimonio del paso por el club de un hombre, un ventarrón zurdo, que dejó huella a trancos largos por la punta izquierda."

Compartir con amigos:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Compartir con amigos:
Facebook
Twitter
YouTube
Instagram
Tiktok